Argentina - El gobierno de Cristina está derrapando

Posted by Nuestra publicación: on lunes, agosto 13, 2012

Fuente: La Chispa

Un descenso creciente en la popularidad, imagen y confianza afecta a la presidenta y consecuentemente a todo su gobierno. Esto no sólo se desprende de los números de encuestas diversas, sino sobre todo se siente en el ánimo de los más golpeados por la política -y también por la no política o negación de cuestiones importantísimas como la inflación y la inseguridad, entre otras- del gobierno: los trabajadores y vastos sectores populares.

Claramente se nota que la presidenta ha perdido el eje -si alguna vez tuvo uno que no fuera acumular caja y poder- en el manejo de la administración del Estado. Toma medidas que se contradicen entre sí; hoy impulsa una, mañana otra distinta y hasta opuesta que borra la anterior de la memoria.

Buscando mejorar su imagen ya en descenso y acumular todos los dólares posibles, emprendió la falsa “nacionalización de YPF” que culminó en lo que pronosticamos desde esta publicación: la búsqueda desesperada de inversores de cualquier origen y magnitud, o sea las propias “enemigas” multinacionales, para poder pagar el pasivo que arrastraba la empresa (totalmente conocido por el gobierno) y ponerla en funcionamiento, convirtiéndose así en socios menores para inmediatamente hacerse de dinero contante y sonante para su caja.

Luego reeditó los fallidos planes de viviendas K con el “Pro Crear” que en una primera (y seguramente única) etapa cubrirían sólo un 3% de los alrededor de 3.000.000 de hogares sin techo propio. Por supuesto la plata saldrá de la ANSES, que está al borde del vaciamiento, pero los jubilados, los verdaderos dueños de esa plata, no pueden beneficiarse con los prometidos créditos, ya que son sólo para personas de entre 18 y 55 años (justicia social y derechos humanos en acción).

¡La plata debe aparecer caiga quien caiga!

El gobierno precisa urgentemente plata para “honrar” los compromisos de la estafa conocida como Deuda Externa. Néstor Kirchner y Cristina Fernández son los gobernantes que más han pagado, y CFK lo seguirá haciendo como se los aseguró a los “líderes” de los grandes países usureros en la reunión del G -20. Aquí en casa son los “poderosos, insensibles, enemigos”, etc., pero afuera cumple con lo que más nos está desangrando e impidiendo desarrollar cualquier futuro medianamente digno.

Pero la plata no aparece porque la economía se está desacelerando y la baja de la actividad económica afecta a sectores tan importantes como automotrices, construcción, inmobiliarias, textiles, combustibles, comercio, etc. De allí la baja en las transferencias de dinero que por ley el gobierno debe hacer a las provincias, que están sufriendo un verdadero ahogo y no pueden ni pagar sueldos ni aguinaldos. Se vienen produciendo cierres de comercios con el consiguiente despido de trabajadores, al igual que en la construcción; suspensiones en plantas automotrices, frigoríficos, etc. En el último año se perdieron 328.000 puestos de trabajo.

Por todo esto, el gobierno no sube el mínimo para aplicar el injusto impuesto a las ganancias que ya afecta a 1.800.000 trabajadores y 2.300.000 perdieron en forma total o parcial la asignación familiar.

La feroz pelea del gobierno contra…los de su propio “hogar”

Daniel Scioli, gobernador de Buenos Aires, ha sido desde el comienzo del imperio K un fiel y sumiso perrito faldero; ocupó los puestos que le ordenaron asumir, apoyó todas las medidas de los gobiernos tanto de Néstor como de Cristina y se erigió en fiel defensor del “modelo”; nunca protestó, ni durante ni después de

los retos en público que le propinaron ambos K. Ahora se ha convertido en uno de los dos máximos enemigos, al que CFK y sus súbditos -Aníbal Fernández, Randazzo, el “traidor” Mariotto y hasta Lorenzino, sí, el Ministro de Economía al que no le conocemos la cara y menos la voz- le disparan públicamente calificaciones que no cabrían, no para un político opositor, sino siquiera para un criminal de guerra.

Hugo Moyano, secretario de la CGT, con quien arreglaban los “techos” para las paritarias, el que no les había hecho ni un parito en los 9 años de los K, el que mandaba los camiones a las empresas “enemigas” del gobierno con el beneplácito de los K (no era “extorsión” entonces), y mil cosas más, ha pasado a ser el otro enemigo máximo, recibiendo la denodada gestión de la presidenta para desbancarlo de su cargo en la CGT y reemplazarlo por la antiguamente odiada burocracia menemista, los “gordos”.

¿Hacia dónde va el país?

Pero no todo está tranquilo y sumiso en el “hogar” gubernamental. Los gobernadores de las provincias asfixiadas se reúnen para organizar el reclamo del envío de la coparticipación que les corresponde; Scioli y de la Sota se juntan

en secreto, sin que se sepa claramente para qué, aunque se rumorea sobre una fórmula presidencial Scioli-de la Sota para el 2015. Algo similar ocurre en Santa Cruz, donde la agrupación kirchnerista La Cámpora está ferozmente peleada con el gobernador Peralta, también híperkirchnerista, quién busca plata hasta debajo de las piedras ( ver nota Pág. 8). Todo esto ocurre en las esferas políticas del propio partido del gobierno. A nosotros nos interesa principalmente qué sienten, qué piensan y qué hacen los trabajadores y los sectores populares, gran parte de ellos votantes de CFK y de Néstor y cada vez más golpeados por la política y los engaños de Cristina que empiezan a enfrentar al gobierno.