Ha comenzado el aterrizaje forzoso de la economía China.

Posted by Nuestra publicación: on lunes, mayo 25, 2015


Patricio Guzmán S.

Lo que ocurre con la economía China es decisivo para las perspectivas económicas de los países de nuestra región, e incluso para el planeta.  Chile es el tercer socio comercial de China América Latina y el Caribe y su mayor proveedor de cobre. Durante varias décadas, el crecimiento de la economía china ha sido de dos dígitos, según el Fondo Monetario Internacional se ha convertido en la primera economía del planeta según el PIB medido por paridad de poder adquisitivo, y en la segunda mayor economía considerado su producto interior bruto nominal. El gigante asiático ha sido el país de más rápido crecimiento en el mundo  desde los años 80, por treinta años ha tenido un promedio de crecimiento anual del 10%. La nación asiática tiene el mayor volumen de comercio internacional.

China es una economía capitalista sui generis, a la que en China oficialmente se denomina “economía de mercado socialista” o «socialismo con características chinas». Desde el punto de vista político el régimen chino es básicamente una dictadura de partido único del Partido Comunista, aunque el partido ha abandonado progresivamente su adscripción incluso formal al marxismo, y las aspiraciones democráticas igualitaristas. Los capitalistas pueden ser ahora miembros del partido, y de hecho en la dirección están algunos de los más grandes multimillonarios de China y el mundo. Por otra parte, el estado sigue manteniendo estrictos controles sobre la economía y tiene el control de empresas estratégicas.
Chile es el tercer socio comercial de China América Latina y el Caribe y su mayor proveedor de cobre, que por otro lado el la principal exportación del país. Por ello es tan relevante la visita del Primer Ministro chino para Chile.

De acuerdo con Margaret Myers, directora del programa de China y América Latina de Diálogo Interamericano, Li Keikang el Primer Ministro chino, está en una gira oficial por la región con la misión declarada de acordar inversiones chinas. “Li ha indicado que empresas chinas quieren enfocar más inversión directa en Colombia, Perú y Chile en los próximos años, que son países bien estables y con buenas oportunidades para la inversión”[1]

Desde hace años se negocia en la mayor confidencialidad, y estaría en la recta final el Acuerdo Transpacífico ó TPP, el tratado multilateral de Asociación Económica[2], aunque los ciudadanos de los países involucrados, entre ellos Chile, Perú y México, no hemos sido informados de los contenidos de las negociaciones secretas, y lógicamente no conocemos sus potenciales efectos negativos, más que por las filtraciones que se han conocido gracias a Wikileaks. Para Obama se trata de una oportunidad para frenar la expansión de la influencia de China. “Si nosotros no escribimos las reglas, China escribirá las reglas en la región” declaró Obama al The Wall Street Journal.

El rápido crecimiento de China, ciertamente le ha permitido al país un aumento importante de la riqueza, que se expresan en el nuevo papel de la nación como potencia en el contexto mundial, pero al mismo tiempo ha tenido duros costos ambientales, sociales – especialmente con el crecimiento de gigantescas desigualdades – y laborales.

Desde la Gran Recesión de 2008-2009, China ha experimentado  grandes dificultades para mantener sus altas tasas de crecimiento, pero ahora ha entrado en un período que muchos analistas califican de “aterrizaje forzoso”, aquello que las autoridades económicas han intentado evitar  por años con políticas de estímulo monetario, rebaja de tasas y planes de inversión, pero que cada vez dan menos resultado y han provocado una economía sobrecalentada, sobre endeudada, llena de burbujas financieras especulativas,  junto con extendida corrupción de una parte y una clase trabajadora joven y altamente concentrada que muestra capacidad creciente de auto organización y lucha a pesar de los esfuerzos de las autoridades para impedirlo.  Todo esto anuncia grandes convulsiones políticas y sociales, porque el régimen ha basado su estabilidad en una combinación de dura represión y crecimiento económico. Esto es lo que hay detrás de la reciente serie precipitada de las políticas de relajación monetaria, los recortes de impuestos y otras medidas de estímulo, que aparentemente revertir el ajuste monetario anterior del gobierno diseñado para "desapalancamiento", es decir dejar de depender de la economía de su adicción a la deuda. La reunión gobernante Politburó a finales de abril añadido a indicios de que un cambio de sentido está siendo ejecutado con mucha reestructuración y reforma publicitado por el régimen de tomar un asiento trasero en el corto plazo a los estímulos medidas, incluso a costa de agravar los niveles de deuda ya graves . El Diario del Pueblo, al informar sobre la reunión, dijo que el Gobierno "probablemente recurrirá a medios viejos" - refiriéndose a una mayor inversión estatal y nuevas medidas para estimular el mercado inmobiliario decaído.

Las autoridades de Beijing han adoptado una batería de políticas de relajación monetaria, recortes de impuestos y otras medidas de estímulo, para revertir el ajuste monetario anterior del gobierno diseñado para  conseguir  el "desapalancamiento", es decir que la economía deje de depender de de su adicción a la deuda, incluso al costo de de agravar los niveles de deuda ya serios. El Diario del Pueblo, al informar sobre la reunión del Politburó de abril pasado, en el que se discutieron estos temas, dijo que el Gobierno "probablemente recurrirá a medios viejos" - como mayor inversión estatal y nuevas medidas para estimular el mercado inmobiliario decaído.

El año pasado, se registró una tasa de crecimiento del PIB oficial de 7,4 por ciento, y este año el objetivo se ha rebajado a "alrededor del 7 por ciento" - un objetivo que aún el Primer Ministro Li Keqiang admite que "de ninguna manera será fácil". Pero para empeorar las cosas estas cifras del PIB son casi de seguro falsas, con el nivel real de crecimiento actual sustancialmente menor, que algunos analistas han estimado más cerca del 4 ó 5%. Algunos economistas advierten que China  ya está en un aterrizaje forzoso o peligrosamente cerca de él.[3]





[1] La Tercera. 24 de mayo 2015. Fernando Fuentes.  El plan de inversiones chino golpea ahora las puertas de Chile.
[2] El TPP impulsado originalmente por Brunei, Chile, Nueva Zelanda y Singapur en 2005, y ahora en las negociaciones también están participando otros ocho países: Australia, Canadá, Estados Unidos, Japón, Malasia, México, Perú y Vietnam. El pacto sería uno de los más importantes del mundo, supondría el 40% de la economía mundial, y 792 millones de personas.
[3] Dikang, chinaworker.info.  May 8 2015. China is in a hard landing now. http://chinaworker.info/en/2015/05/08/10232/