Patricio  Guzmán
Pulso Económico, 09 de abril 2013.

Los fondos A y B tuvieron pérdidas en marzo. Los fondos D y E obtuvieron ganancias.

En marzo los fondos A y B de las AFP anotaron pérdidas, y los fondos D y E, menos riesgosos, tuvieron ganancias. El rendimiento del fondo "E" fue el mejor del mes con un 0,27%, mientras que el fondo "D"  rentó un 0,23 por ciento.

El fondo "C" -de riesgo medio- tuvo una leve alza del 0,13 por ciento en marzo.

En tanto, los fondos "A" y "B", con mayor exposición al riesgo, anotaron leves caídas de 0,06 y 0,09 por ciento, respectivamente.

¿Quién paga las pensiones en Chile?

Alrededor del 60% de las pensiones en Chile, las paga el estado[1]. Las pensiones del sistema de AFP, pagadas por las propias AFP  o por las Compañías de Seguro, solo suman aproximadamente el 39.7% del total de la jubilaciones que se pagan.

Las pensiones administradas por el IPS a cargo del sistema antiguo de reparto suman cerca del 30.6%, y las pensiones solidarias un 17.7%.  Actualmente la pensión básica solidaria es de $80.528, esta pensión es para quienes no tienen ahorros previsionales. Los afiliados a las AFP, que cumplen con los requisitos establecidos por ley[2],  tienen asegurada por el estado una pensión  mínima de $261.758

En el futuro la tendencia de las pensiones promedio es a disminuir. La propia superintendente de Pensiones Solange Berstein, firme defensora del sistema de capitalización individual, ha advertido que en el futuro las rentabilidades de los fondos de pensiones no serán las que han sido en el pasado, además comenzarán a pensionarse masivamente afiliados sin bono de reconocimiento del sistema antiguo, lo también se traducirá en pensiones más bajas. Las pensiones del llamado “Pilar Solidario”, se denominan “no contributivas”, porque es el estado el que debe hacerse cargo, sin que reciba transferencias de los trabajadores, o de los empresarios que los contratan, durante su vida activa. Considerando que se prevé que cerca del 60% de los trabajadores que cotizan a las AFP apenas llegarán a una pensión de $150.000 o menos, algunos economistas han advertido que el modelo llegará a ser insostenible, representando una carga cada vez más onerosa para el fisco y para el orden de las cuentas macroeconómicas del país.

Las pensiones de los jubilados de las Fuerzas Armadas y de Orden, los únicos nuevos funcionarios que siguen sin ser incorporados al sistema de AFP, que se gestionan a través de Capredena y Dipreca, por su parte, suman un 12%, de los montos destinados a pensiones.

De paso estos datos echan por tierra la idea que el sistema de AFP libraría al estado de la pesada carga de pagar pensiones, pues en la medida que el sistema es incapaz de pagar pensiones mínimas el estado tiene que asumir complementarlas.

El año 2012 3 de las 6 AFP existentes fueron compradas por multinacionales de los seguros, dos basadas en Estados Unidos y otra en Colombia. En un artículo publicado en El Mostrador el 19 de febrero[3], Gino Lorenzini, pregunta “¿Porqué 3 aseguradoras adquieren 3 AFP en sólo un años? Los fondos de pensión son la principal fuente de financiamiento de todo el sistema financiero, tanto público como privado. En países como Chile, que comenzaron hace más de 30 años con el sistema de capitalización individual, el fondo total supera los US$ 160.000 millones, lo que representa un 61 % del PIB Chileno, en contrapartida en EE.UU representa sólo el 17 % del PIB. Tener acceso a esos fondos es muy importante para los conglomerados financieros internacionales.” En otras palabras, las grandes corporaciones multinacionales, los grupos económicos se hacen con una jugosa caja para apalancar sus inversiones con un costo bajo. El propósito prioritario del sistema de AFP, no es pagar pensiones, más bien es facilitar la acumulación de capital a las grandes empresas, y en esto ha sido muy exitoso.