Grecia: Unir las luchas y derrocar al gobierno

Posted by Nuestra publicación: on lunes, junio 06, 2011


Desde el miércoles 25 de mayo las plazas centrales de Atenas y de otras ciudades griegas han sido ocupadas por manifestantes.


Las enormes movilizaciones de jóvenes y trabajadores griegos contra las medidas de austeridad continúan, ya que las masas griegas han llegado a la conclusión de que no tienen otra alternativa ahora excepto la lucha. Como resultado del terremoto social provocado por las movilizaciones de los jóvenes, que sigue el ejemplo de los jóvenes españoles, se ha adelantado la fecha de la próxima huelga general al 15 de junio desde el 21 de junio. Esto responde a la presión masiva de las bases y al sentimiento de que no se puede esperar más. El martes y miércoles (1 y 2 de junio) entre 50.000 y 70.000 personas pasaron por la plaza Syntagma, enfrente del parlamento. Capas de la clase media-alta que nunca antes habían participado en huelgas, manifestaciones o protestas sociales, se están uniendo a los trabajadores y los jóvenes. Una característica importante es la ausencia de violencia, que antes había incluido choques entre la policía y jóvenes anarquistas, lo que ha motivado que la idea de unirse se haya extendido ampliamente a nuevas capas.


El movimiento probablemente va impulsar nuevas huelgas. Xekinima (la sección griega del CIT) está poniendo sobre la mesa la cuestión de ocupaciones de centros de trabajo claves, al mismo tiempo que enfatiza la necesidad de construir comités democráticos de lucha y la convocatoria de huelgas generales de 48 horas como una preparación para acciones más extendidas que derriben el gobierno. Estos comités de trabajadores, jóvenes y otros participando en la lucha pueden formar la base de un nuevo gobierno que pueda romper con el capitalismo.

La gran rabia en el estado de ánimo se vio reflejada cuando un grupo de manifestantes bloquearon la entrada al parlamento, obligando a varios diputados a salir rápidamente de los jardines.

En Corfú (isla griega) un grupo de diputados del Pasok fueron vistos comiendo langosta en un restaurante de la playa. Una multitud de varios cientos los rodearon y les lanzaron yogures. Era tal la rabia mostrada por esta multitud, que se llamó a la policía militar marítima para que acudiera en barco a sacar a los diputados de la isla.


www.socialistworld.net (página web del CIT en inglés),
2 Junio 2011


Declaraciones de Andros Payiatsos de Xekinima (CIT en Grecia) a The Socialist, periódico semanal del Socialist Party (CIT en Inglaterra y Gales).

¿Puedes describir este movimiento de los jóvenes?

Esta ola de ocupaciones es obviamente una respuesta a los acontecimientos en España, que a su vez estuvieron influenciados por los movimientos de masas en Túnez y Egipto. Esto muestra la fuerza que tiene el internacionalismo.

La ocupación es también una respuesta a las condiciones de vida a la que se enfrentan los jóvenes. El desempleo en Grecia ha alcanzado máximos históricos. La federación de los sindicatos griegos dice que la cifra real es 22%. El desempleo entre los jóvenes es aproximadamente el doble. El salario básico neto para nuevos trabajadores está alrededor de los 520 EUR al mes neto, lo que es un salario de miseria.

Este movimiento es un acontecimiento muy importante, pero aún no está claro como continuará. El miércoles 25 de mayo estimamos que había 50.000 personas en la Plaza Syntagma, donde el movimiento empezó. Esto incluye a personas que no estuvieron durante toda la duración de la protesta, que se desarrolló desde las 18:00 hasta las 2:00. Los trabajadores que tienen familias no pueden quedarse todo ese tiempo. Hubo manifestaciones enormes en unas 15 ciudades griegas como Tesalónica, Patras, Volos y otras.

No son solo los jóvenes los que están participando. Hay pensionistas y trabajadores; todos intentan contribuir. Parece que se han establecido las bases para que las ocupaciones continúen en dos ciudades principales.

Hay grandes asambleas en las que, aunque duren cinco horas, participan un gran número de personas. Se han establecido comités que están al cuidado de aspectos técnicos – comida, agua, conexiones Wi-Fi, etc.

En España hemos visto una cierta antipatía hacia los sindicatos y los partidos políticos. ¿Está también presente entre los jóvenes griegos?

Como en España, el deseo de no involucrar a los sindicatos y a cualquier partido político es muy fuerte. Pero también pensamos que esto es muy temporal. Creemos que una vez que esto se desarrolle en un movimiento, la necesidad de darle unas dimensiones masivas para hacerlo efectivo será obvia. Y entonces la juventud tendrá que apelar a la clase trabajadora, a los sindicatos. Esto será un llamamiento principalmente a las bases de los sindicatos, porque los líderes sindicales son odiados, y también a la base de los partidos de izquierda, debido a la hostilidad hacia estos partidos.

Los miembros de Xekinima están jugando un papel en los comités de coordinación de la ocupación en las ciudades claves de Atenas y Tesalónica. Una de las demandas centrales que están planteando, tanto en las asambleas como en el material que estamos produciendo y distribuyendo, es que queremos que los trabajadores vengan; queremos que todos los trabajadores que están en huelga vengan a las plazas al final de sus huelgas y que se queden allí. Si los trabajadores de la electricidad tienen una huelga de 48 horas, por ejemplo, nos gustaría que después de su manifestación vinieran a la plaza para proporcionar y recibir apoyo y solidaridad.

Tenemos confianza en que estas tácticas tendrán una buena acogida, y también confío en que la mayoría de las asambleas apoyarán estas ideas cuando se planteen.

La rabia debe estar hirviendo con los nuevos recortes y privatizaciones que está discutiendo el gobierno griego.

Sí. El gobierno griego está actualmente llegando a un acuerdo para un segundo memorándum con la “Troika”, el FMI, la Unión Europea y el Banco Central Europeo. Esto en realidad significa que después de un año aplicando sus políticas, que básicamente son bárbaras y están destruyendo la vida de cientos de miles de personas, sino de millones, llegaron a la conclusión de que están políticas habían fracasado.

El año pasado hubo cuatro olas de ataques. El segundo memorándum significa aún más ataques. La gente está desesperada.

La velocidad de los acontecimientos en Grecia es sorprendente. Nacen nuevos movimientos, pero como no hay un liderazgo que pueda proporcionar un programa y una estrategia de lucha, no duran mucho.

Y después tienes las reacciones a los ataques fascistas de hace dos semanas. Esto solamente puede entenderse si uno ve a la sociedad griega como una serie de convulsiones. Hay una gran indignación entre la gente, pero también una gran desesperación. Y tratan de buscar una salida.

¿Cuál ha sido la respuesta a los ataques fascistas?

Lo primero que debo decir es que lo que pasó fue impactante. Durante cuatro días los nazis, no simplemente populistas de extrema derecha, estuvieron persiguiendo a cualquier inmigrante que veían en las calles, atacándoles con cuchillos o con cualquier cosa que tuvieran. Entraban en tiendas de inmigrantes y los destrozaban todo, era como un pogromo. La policía miraba y no hacía nada. Cualquier griego que protestara ante la policía, en esencia, era entregado a los fascistas para que lo golpearan hasta que tuvieran que hospitalizarlo.

Esto realmente conmocionó a la izquierda. Los partidos grandes de la izquierda siempre han subestimado los peligros del fascismo. Xekinima siempre enfatizó que las condiciones que se estaban creando y la rabia, desesperación y frustración pueden llevar a un aumento del racismo y el fascismo. Estos hechos muestran que hay que luchar contra el fascismo desde el principio, incluso si tienen fuerzas pequeñas.

Ahora el problema es que no ha habido aún una respuesta seria al fascismo por parte de los partidos de izquierda o los sindicatos. Por desgracia, a pesar de las propuestas de Xekinima y de cinco reuniones con bastantes participantes, los diferentes grupos de izquierda no han querido adoptar una actividad unitaria. Es ridículo, escandaloso. Sin embargo, debe haber una lucha contra los fascistas.

La extrema derecha ha intentado intervenir en las ocupaciones y aprovecharse de la confusión que existe para promocionar eslóganes nacionalistas. Pero se luchó con éxito contra ellos y tuvieron que retirarse. Los jóvenes y los miembros de Xekinima contestaron a los argumentos políticos de los fascistas. Ahora parece que los fascistas se han retirado del movimiento y que, por el contrario, están atacándolo.

¿Cuál es el camino a seguir que propone Xekinima?

Ha habido muchas luchas importantes recientemente. Los trabajadores de los autobuses tuvieron huelgas durante un periodo de tres meses. Pero fueron derrotados debido a una traición de sus líderes. Y también se produjo la magnífica ocupación del ayuntamiento de Atenas por parte de sus trabajadores temporales. Después de cuatro semanas también fueron traicionados. Todo esto ha aumentado la frustración.

También hemos visto el desarrollo de movimientos como el de no pago de las tasas de autopistas, que fue característico de los tres primeros meses del año. Pero éste también murió porque los grandes partidos a la izquierda no pusieron sus fuerzas detrás de ellos.

Y ahora tenemos este movimiento de ocupación que de nuevo es espontáneo y de base. Por desgracia, el KKE, el Partido Comunista Griego, se opone a él. Synaspismos, el otro partido principal de la izquierda, tampoco ha sabido darle una orientación.

Hemos tenido muchas huelgas en muchos sectores. También hemos tenido nueve huelgas generales hasta ahora. Y la próxima ha sido convocada para el 21 de junio. Hay un movimiento de huelga continuo; los jóvenes pueden ver el poder de la clase trabajadora.

Pero al mismo tiempo entienden que este tipo de lucha no es suficiente para resolver sus problemas, sino que se necesita algo más. Se convoca un día de huelga general cada 2 ó 3 meses. Lo que se necesita es un movimiento huelguístico más decidido que pueda paralizar el gobierno y, esencialmente, como proponemos en las asambleas de las ocupaciones, derrocarlo.

Aunque hay mucha confusión la gente entiende que el país está gobernado por lo que todo el mundo ahora llama en Grecia “ladrones y mentirosos”. El lema “que se vayan” está muy extendido. Ocho de cada diez personas en la calle estarían de acuerdo.

Pero esto no es lo mismo que entender que para echar abajo el gobierno se requiere una lucha organizada. Por eso en Xekinima explicamos que las políticas de este gobierno, que representa a las multinacionales y a los banqueros, están destruyendo todo – sin exagerar. Y que si queremos hacer desaparecer estas políticas, tenemos que derrocar al gobierno.

Un movimiento espontáneo como este que está ocupando las plazas no es suficiente. Hay que organizarlo bien, hay que vincularlo con la clase trabajadora; hay que vincularlo con las huelgas. Tiene que unirse con la demanda de derribar al gobierno y oponerse a cualquier gobierno formado por “Nueva Democracia”, el tradicional partido capitalista. Y por supuesto al mismo tiempo también proponemos el resto de nuestras demandas políticas, incluyendo la oposición al pago de la deuda y la nacionalización de los bancos, vinculados con el argumento de que la única salida para la clase trabajadora y los jóvenes griegos es romper con el capitalismo.

Anteriormente hicimos una llamada a los partidos de izquierda para colaborar en el derrocamiento del gobierno. Esto se hizo cuando el voto combinado a la izquierda estaba recibiendo el 25-30% de apoyo en las encuestas y la idea de la izquierda tomando el poder podía ser vista como posible. Ahora, no solamente la juventud, sino también grandes sectores de la clase trabajadora están muy decepcionados por la izquierda.

En encuestas recientes, el 45% dijo que no votarían por nadie si hubiera elecciones ese día. Esto no tiene precedentes en Grecia. Normalmente la abstención se sitúa en el 20-25%.

Pero cuando la gente pregunta quién remplazará a Pasok cuando nos libremos de su gobierno, contestamos que nosotros, los jóvenes, los trabajadores, los activistas, pueden remplazar a los gobernantes actuales. Basándonos en este movimiento, basándonos en los comités representativos de este movimiento, y también apoyados por importantes secciones de la base de la izquierda (e incluso algunas secciones de sus líderes) podemos sentar las bases y las estructuras de un nuevo poder que representará a las masas trabajadoras y sustituirá a los “ladrones” del parlamento. Esta idea tiene una amplia aceptación.

La entrevista se realizó el viernes 27 de mayo, dos días después de que empezara la ocupación. El domingo 29 de mayo tuvo lugar una de las mayores movilizaciones en la plaza Syntagma. Durante toda su duración había presentes de 50.000 a 70.000 personas, pero Xekinima estima que el número total de personas que pasaron por la plaza está alrededor de las 200.000.

La reunión general del 27 de mayo, la tercera en una serie de concentraciones diarias, decidió de manera casi unánime vincularse con las oleadas de huelgas que se están produciendo e invitó a todos los trabajadores en huelga a la plaza, para declarar que la ocupación continuará hasta la caída del actual gobierno y rechazar el reconocimiento de la deuda soberana como la deuda del pueblo.