El primer paso!
Danny Byrne, CIT, informa desde Barcelona
El 29 de septiembre, 10 millones de trabajadores y 1,4 millones de manifestantes se movilizaron enojados en contra de la propaganda del gobierno español y los medios de los patronos, que en las últimas semanas han movido montañas para asegurar a la sociedad española del "inevitable fracaso" de la huelga general . El día después de la huelga, sin embargo, todos los periódicos incluso los más derechistas se vieron obligados a admitir que la huelga había sacudido al capitalismo español. El principal diario de España, 'El País' , comparó su dimensión e impacto con de la huelga general masiva contra el gobierno del PP de José María Aznar en 2002. El 29 de septiembre se vio la movilización de millones en la primera huelga general contra el gobierno del PSOE ("socialista") de Zapatero, cuyo programa de austeridad brutal de recortes y la reforma laboral para abaratar los despidos en un país que sufre el desempleo endémico, ha abierto un nuevo período de grandes batallas de clase. La huelga general marcó la entrada de la clase obrera española en el escenario de la lucha con todo su peso y poder. Sin embargo, representa sólo los primeros disparos en lo que será un enfrentamiento épico entre los protagonistas del 29 de septiembre y los capitalistas españoles, decididos a la tala y quema del nivel de vida y las perspectivas de la mayoría en el servicio a los mercados sin rostro y los tenedores de bonos que, según parece , actualmente detentan el poder real.
Los patronos de la CEOE "federación se ha empeñado en pintar la huelga como ineficaz en sus consecuencias, citando cifras de entre 3% y el 10% de participación (en contra de cifras de los sindicatos de más del 70%!). Sin embargo, los indicadores reales de participación en la huelga pintan un cuadro claro. El consumo de electricidad durante el día h bajó a los niveles típicos de consumo de fin de semana o vacaciones, lo que revela el cierre de la industria. Informes del impacto de la huelga en el transporte público y la educación también dan cuenta de la parálisis del país. Datos sindicales indican que en la región norte de Asturias, que ha estado en el centro de la lucha de los trabajadores mineros en contra de la destrucción de miles de puestos de trabajo, la friolera de 84% de los trabajadores participaron en la huelga, con los números también en más del 80% en Cataluña, Galicia y Castilla-La Mancha.
1,4 millones en las calles
"Se nota, sí Siente, La Huelga ESTA PRESENTE!" cantaban los trabajadores y los jóvenes en los "piquetes", que recorrieron los centros de las ciudades y pueblos desde la mañana. En estos piquetes, cientos de huelguistas se aseguraban de que las corporaciones multinacionales, como la cadena de centros comerciales 'El Corte Inglés', cuya gestión con saña antisindical obligó a sus empleados a trabajar durante la huelga, no gozaran de "negocios como siempre" .
Enormes manifestaciones congelaron los centros urbanos de todo el país. A medida que el día avanzaba, las cifras de participación de las distintas ciudades, donde las manifestaciones tuvieron lugar en diferentes momentos, superó todas las expectativas. 50.000 en Sevilla, 100.000 en Asturias ... A continuación, las manifestaciones por la noche en Barcelona y Madrid congregaron increíbles 400.000 y medio millón, respectivamente. Estas manifestaciones estuvieron llenas de vida y determinación. Los trabajadores de todos los sectores, los estudiantes en contingentes organizados, incluso los trabajadores de McDonald's y los taxistas estaban representados en la manifestación en Barcelona!
Estas marchas transmitieron un mensaje claro e incuestionable a todos los que podían verlas: la clase obrera está aquí, y no sólo por un día, si no para paralizar los ataques del gobierno y el capitalismo. La reforma del trabajo forzada a través del gobierno significará, de aplicarse, un cheque en blanco a los patronos para hacer más despidos en masa, con menos indemnización por despido, subvencionado por el contribuyente! Todos los planes del gobierno, incluyendo el aumento inminente de la edad de jubilación a 67 años y la congelación de las pensiones estatales, representan un serio intento de recortar los niveles de vida, y hacer que el desempleo masivo, la precariedad, la miseria y la lucha para llegar a final de la mes, sea la norma en la España de "post-crisis". Al igual que en Grecia, frente a un ataque contra su futuro, los trabajadores españoles y los jóvenes no tienen ninguna posibilidad, excepto luchar!
No al chantaje de "servicios mínimos"!
En lo inmediato a la huelga, se suma la cuestión de los "servicios mínimos" que ha dominado los titulares de noticias. La legislación anti-democrática en España requiere que los sindicatos esten de acuerdo con el gobierno y los patronos antes de la huelga, sobre la mantención de los servicios mínimos durante las huelgas. Esta ley sirve como una herramienta para facilitar los ataques contra el derecho a huelga efectiva, con el gobierno y las organizaciones de empleadores exigiendo niveles ridículos de "servicios mínimos", tales que negarian por completo el impacto de la huelga. Las exigencias del gobierno en el período previo al 29 de septiembre incluían que el transporte público y los vuelos internacionales se mantuvieran en un 40-50% durante la huelga general! En varias regiones, entre ellas Madrid, los sindicatos correctamente se negaron a aceptar tales normas abusivas, rompiendo las leyes anti-sindicales del gobierno. Esto es consecuencia del ejemplo heroico de los trabajadores de Metro de Madrid, que durante el ataque contra su salario que iba a ser reducido en un 5% en junio, desafió las resoluciones del Gobierno regional y ejecutó un ataque eficaz, que consiguió reducir el recorte al 1% . Todos los trabajadores reconocen la necesidad de mantener algunos de los servicios mínimos esenciales, como en la asistencia sanitaria, durante las huelgas, incluso huelgas generales. Sin embargo, la prestación de estos servicios debe ser decidido por los sindicatos y los trabajadores en huelga democráticamente. Los dirigentes sindicales deben negarse a permitir que el movimiento de los trabajadores sea chantajeado. El CIT en España defiende una ruptura decisiva con esta legislación anti-democrática, y la fijación de servicios mínimos democráticamente por el movimiento de los trabajadores, sin la participación del gobierno y la patronal.
En Barcelona, la huelga general se vio empañada por las acciones de un pequeño grupo de manifestantes "anarquistas", los que durante una manifestación por la tarde de cerca de 5.000 trabajadores y estudiantes, se aprovechó de la multitud reunida para participar en enfrentamientos sin sentido con la policía antidisturbios, que incluyó la quema de coches de policía, poniendo en peligro la seguridad de los manifestantes pacíficos. Aunque se sospecha la participación de agentes provocadores en estas acciones, incluso si los "anarquistas" que participaron en estos enfrentamientos estaban motivados por una ira genuina y el deseo de cambiar el mundo, han caído en una trampa contraproducente. En lo que fue un buen día de lucha contra la ofensiva del capitalismo, este era el único punto brillante para Zapatero y la CEOE, dotándolos de las imágenes que se utilizaron previsiblemente a pintar toda la huelga y sus participantes como saboteadores violentos. También proporcionó a la policía el pretexto de la carga brutal contra una multitud fuera de un edificio bancario ocupado con éxito en la Plaza de Catalunya, y la evacuación del banco. En las luchas que vienen, el éxito en romper el programa de austeridad de la clase dominante española no vendrá de las bombas de gasolina de unos pocos "guerreros de fin de semana", sino de la acción colectiva de la masa de la clase obrera y la juventud, vinculados a la lucha por alternativas a los partidos del sistema político, las políticas realmente socialistas.
La urgente necesidad por representación política efectiva de masa de la clase obrera en todo el estado español se refleja en el hecho de que, si bien, según los sindicatos, el 70% de los trabajadores se declararon en huelga, sólo seis parlamentarios se unieron
a la acción, mientras que el resto pasó el día en la emisión de declaraciones para socavarla! Izquierda Unida (Izquierda Unida), una formación de izquierda amplia, jugó un papel encomiable en la construcción de apoyo a la huelga, asignándose a sí misma el papel de "motor de la huelga", y la organización de las asambleas preparatorias en las últimas semanas. Sin embargo, para el desarrollo de IU como una voz política de masas de trabajadores y jóvenes, será necesario que este enfoque se base y esté vinculado a una alternativa, de un programa político realmente socialista, por la nacionalización de los bancos y el sector financiero y los sectores clave de la la economía bajo el control democrático y la gestión de la clase obrera, y para quebrar el poder de los mercados. Estas políticas son capaces de atraer a las nuevas capas de trabajadores y jóvenes a la actividad política.
El primer paso!
La próxima evolución en la lucha aún no están claros. Los dirigentes sindicales, que han sido arrastrados a la lucha pataleando y gritando después de más de un año de abrumadoras demandas por una huelga general en las filas de los sindicatos, finalizaron el 29 de septiembre con un llamamiento al gobierno para volver a convocar a las negociaciones, y advirtió que movilizaciones continuarán hasta que el gobierno cambie su curso, incluida la retirada de sus ataques planeados en materia de pensiones y la edad de jubilación, que se retiró en la primavera después de las manifestaciones de masas en todo el país. Sin embargo, la determinación del gobierno para seguir cumpliendo con sus jefes en las bolsas de valores y las agencias de calificación de crédito, se requiere un programa igualmente decidido y coherente de lucha de la clase obrera, no más meses de negociaciones sin sentido con el gobierno y la clase dominante que tiene la intención de seguir adelante con sus ataques.
El día después de la huelga, los mercados se vengaron, con la calificación crediticia de España otra vez degradada por Moody's
Lo que está claro es que para detenerlos será necesario un movimiento sostenido de masas. Grecia, donde los trabajadores han llevado a cabo seis huelga general de este año, da una idea del tipo de lucha que será necesaria en España.
Los miembros del CIT y sus partidarios participaron en los piquetes de huelga general y manifestaciones en Barcelona, Sevilla, Murcia, Salamanca y Vitoria, vendiendo su periodico, Socialismo Revolucionario, con el título principal "Huelga general: el primer paso". Hacemos un llamado para la construcción de un movimiento de masas sostenido, incluyendo una serie de huelgas generales en los próximos meses, con la formación de comités democráticos de acción y asambleas para decidir los próximos pasos de la lucha. Luchamos para conseguir apoyo para las ideas del socialismo revolucionario genuino, y para la adopción por el movimiento obrero de un programa económico y político alternativo, vinculado a la lucha para transformar la sociedad, poner fin a la dictadura de los de buitre de los mercados y establecer el socialismo democrático en el Estado español y a nivel internacional.
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