Bélgica: Manifestación contra la matanza de indígenas en Perú

Alto a la sed de beneficios de las multinacionales en Perú!

Debemos generalizar la lucha para derrocar al Presidente García!

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Ayer por la tarde, unos 200 manifestantes, en su mayoría latinos, y también unos cincuenta belgas, se manifestaron en el exterior de la embajada peruana en Bruselas. De esta manera, apoyaron la movilización convocada por el Frente de Defensa de la Soberanía y de la Vida, integrado por organizaciones de trabajadores, campesinos y pueblos indígenas. La base de esta protesta: una masacre por la policía peruana. Esta última, el 5 de junio, había abierto fuego desde varios helicópteros a un control de carretera de unos 5.000 indígenas, cerca de Bagua en la región amazónica. Balance: Más de 200 heridos y 60 muertos.

Informe y fotos de Eric Byl, (PSL, CIT en Bélgica)

Desde el 9 de abril cerca de 60 grupos étnicos indígenas se están movilizando para derogar 11 decretos gubernamentales. Estos decretos son el resultado de los acuerdos de libre comercio (TLC) para dar luz verde a las multinacionales para explotar las riquezas naturales. La cuestión es muy importante, debido al reciente descubrimiento de grandes reservas. Compañías petroleras como Petrobras de Brasil, y también las empresas forestales y las mineras, frotan las mangas al presidente peruano García.

La población indígena teme el saqueo de la región, la contaminación y la desaparición de beneficios en las cajas fuertes de las multinacionales, dejando sólo migajas para comprar a la elite local. El Presidente Alan García está dispuesto a llegar a todo. En este ataque a la multitud, los fugitivos fueron perseguidos a las montañas, varios de ellos fueron asesinados en su casa por balas disparadas desde helicópteros. El pueblo resistió, 38 policías fueron tomados como rehenes, 20 de ellos fueron muertos en represalia por la matanza.

No es esta la primera vez para García. Según la Comisión de la Verdad, él habría dejado masacrar durante su primer mandato más de 100 presos izquierdistas. También dejó abrir fuego contra los trabajadores en Retamas y Casapalca, donde trabajadores fueron asesinados. No es casualidad que en la protesta fuera de la embajada, el presidente García fuera comparado con Uribe de Colombia. Su objetivo es claro: con una derrota de los indígenas, quiere paralizar la totalidad del movimiento social y de trabajadores. Esto debería permitirle continuar su política de liberalización favorable a las multinacionales, la privatización y los ataques contra los salarios y las condiciones de trabajo. García instrumentalizará el hecho de que los indígenas han matado a funcionarios para tipificar como delito el movimiento y aumentar la represión.

Otro desarrollo hubiera sido posible. Si se hubiera vinculado la derogación de los 11 decretos a la demanda en contra de la privatización de los puertos y otras reivindicaciones de los trabajadores, el movimiento podría haber dado otro giro, hacia una paralización generalizada de la economía en su conjunto y, en última instancia obtener la caída del presidente García y su camarilla. Lamentablemente, en el Perú, también, los sindicatos están atados a los políticos de la oposición que quieren, sobre todo, la estabilidad y, desde luego, no quieren una generalización de la lucha le pueda provocar una ruptura con el sistema. Esto explica que durante 50 días, los dirigentes sindicales de la CGT hayan abandonado a su suerte a los indios, sin ir más allá de la presión parlamentaria y la resistencia verbal.

La convocatoria del "Frente para la Defensa de la Soberanía y la Vida", integrado por organizaciones de campesinos, obreros e indígenas, de un día nacional de lucha es un gran paso adelante. Esperemos que sea el comienzo de un movimiento generalizado.