Las leyes de la dictadura vuelven de la mano del Partido Socialista

Posted by Nuestra publicación: on jueves, agosto 14, 2008



Celso Calfullan, Socialismo Revolucionario, CIT Chile

La designación de Marcelo Schilling por parte de la cúpula del Partido Socialista, como un flamante nuevo diputado nos muestra hasta que punto a llegado la degeneración de este partido.
Nuevamente gracias al PS tenemos parlamentarios designados a dedo, precisamente en el estilo que el dictador Augusto Pinochet quería tener en el Parlamento.


¿Quién es Marcelo Schilling?
Marcelo Schilling representa lo peor de lo que hoy compone la cúpula del PS. Schilling fue el encargado de la famosa "oficina", que no era otra cosa que la maquinaria del soplonaje que creo la Concertación para destruir a los que ellos consideraban "desadaptados o terroristas".
La "oficina" estaba llena de soplones y traidores, que por unos cuantos pesos, estaban dispuestos a vender hasta su madre si era necesario, Schilling era la máxima expresión de toda esa basura. Pero el soplonaje solo fue uno de sus métodos, por que también practicaron montajes al estilo DINA-CNI, como el tema de las armas que hicieron aparecer en manos de unos supuestos grupos subversivos.

El premio a tanta infamia y cobardía, fue designarlo embajador en Francia, una vez que cumplió con su labor de soplón y también una manera de protegerlo de las amenazas de grupos de izquierda que se la tenían jurada.
La derecha todavía esta muy agradecida por los servicios que les presto este "ilustre socialista" en la defensa de sus intereses, lo que no hizo Pinochet, lo termino Marcelo Schilling.


¿Quién se presto para blanquear a Schilling?
La labor de "blanqueamiento" de Schilling empezó hace un tiempo, junto con su participación en el Parlamento Social y Político, haciéndolo aparecer como uno de dirigentes "progresistas" del PS, un socialista dispuesto a hacer alianzas con la izquierda extraparlamentaria. No podemos descartar que quizás sólo este recolectando nombres para el futuro, cuando tenga que hacer nuevamente de verdugo de los militantes de izquierda "descarriados", que no aceptan toda esta farsa que han creado y que ellos llaman democracia, una democracia en la que precisamente algunos diputados pueden ser designados a dedo por un par de personajes, del estilo Camilo Escalona.


¿Quién es el nuevo Presidente de la Cámara de Diputados?
El nuevo presidente de la Cámara de diputados, Francisco Encina, es el más claro ejemplo de la actual democracia que nos rige, este personaje nunca a sacado votos suficientes para salir elegido diputado por sus propios meritos, sólo es diputado gracias al sistema binominal, hasta ahora sólo ha salido por arrastre.
Lo anterior nos lleva a que en la máxima instancia de la Cámara de diputados, hoy se encuentra uno de los miembros que tiene casi nula representatividad ¡Viva la democracia! ¿Podemos confiar en que estos personajes van a cambiar las actuales leyes electorales? Para creer en eso, se debe ser muy ingenuo, lamentablemente cuando se escribe no se pueden usar expresiones mas duras, un buen chilenismo vendría como anillo al dedo, en vez de la palabra ingenuo.


¿Cómo se puede ser socialista hoy?
Los militantes honestos hoy sienten vergüenza cada vez que tienen que decir que son socialistas, normalmente junto con decir que lo son, viene con una larga explicación de lo que es para ellos decirse socialistas.
Hace mucho tiempo que los partidos socialdemócratas se han derechizado en el ámbito mundial, pero sin lugar a dudas una de las ilustraciones más dramáticas de este proceso puede verse en el actual Partido Socialista chileno y su dirección claramente reaccionaria.
No podemos olvidarnos que este partido fue parte del gobierno de la Unidad Popular que encabezo Salvador Allende y que ese gobierno ha sido uno de mas progresistas que ha tenido este país en toda su historia.


¿Cómo llegamos a la actual situación del Partido Socialista?
Lo central es que a diferencia de lo que ocurre hoy, durante la Unidad Popular el PS era una organización con militantes activos que presionaban para que sus demandas fueran tomadas en cuenta y asumidas por el partido, hoy esa presión no existe y a raíz de esto los dirigentes del PS, llevan a cabo sus políticas reaccionarias sin ningún tipo de contrapeso.

Es fundamental construir un nuevo partido de trabajadores.
Esta mas que claro que el PS no representa ni remotamente los intereses de los trabajadores, como si lo hizo históricamente hasta el gobierno de la Unidad Popular.
Los trabajadores lamentablemente no tenemos otro camino más que empezar a construir un nuevo partido de los trabajadores, que realmente represente esos intereses.
Necesitamos construir un partido que no sólo tenga el nombre de socialista, mientras defiende políticas neoliberales, sino que realmente luche por construir una sociedad socialista.

Celso Calfullán. Socialismo Revolucionario